La percepción de los representantes sindicales acerca del Teletrabajo implementado como modalidad laboral en el sector público costarricense
Resumen
El desarrollo de las tecnologías de la información y las telecomunicaciones ha introducido en gran cantidad de países distintas formas de prestación de servicios de parte de un individuo a las órdenes de quien figura como su patrono.
Estas nuevas modalidades de trabajo se presentan de una forma muy distinta de lo que en épocas anteriores se dio a conocer con el trabajo de la Manufactura, la Revolución Industrial y la Revolución Científica; hoy en día, grandes cambios y avances en la ciencia moderna representan la Revolución Tecnológica, brindando a la sociedad del conocimiento la manipulación de la información, aportando a la humanidad nuevas formas de comunicación y oportunidades de explotar la creatividad en el ámbito social, laboral, familiar, entre otros.
Como resultado de esta Revolución Tecnológica y posterior a los años 70, aparece la figura del Teletrabajo que, como parte de la sociedad informática y en conjunto con los avances tecnológicos, la velocidad de las redes de comunicación y el fácil acceso a internet, ha posibilitado a favor de trabajadores -genéricos y calificados- el uso de las tecnologías de la información y la comunicación (TIC), para ejecutar labores desde fuera del centro de trabajo, sin necesidad de desplazarse hacia la empresa ni de cumplir un horario o jornada específica.
Lo anterior, si bien tiene beneficios importantes, también puede generar en la práctica cambios significativos tanto en las empresas, como en las condiciones laborales de los teletrabajadores; este último supuesto, en caso de llevarse a cabo de una forma inadecuada, puede acarrear efectos perjudiciales a quienes lo ejecuten que repercuten también en el trabajo realizado y, por ende, en las empresas. Ello es así, porque la característica principal de esta modalidad, consiste, por una parte, en la ruptura de la relación entre el hombre y su lugar de trabajo y, por otra parte, en la separación entre el trabajo y el horario dentro del cual se prestan los servicios.