dc.description.abstract | El presente trabajo nace del interés por reconocer y validar la importancia e impacto que puede tener la incorporación de la neurociencia en el sistema educativo costarricense, por lo que tiene como objetivo conocer y reflexionar sobre los conocimientos que tienen un grupo de docentes respecto a este tema; así como la importancia que atribuyen a los aportes de la neurociencia en los procesos de enseñanza aprendizaje.
Además, tuvo como fin identificar sí en la formación profesional de quienes participaron, se recibió información en el tema. Por otra parte se analizan las condiciones que a su criterio se requieren para acceder al conocimiento de los avances en la temática, de manera que incidan en la práctica educativa.
Este estudio responde a una investigación de tipo cualitativo, con un diseño descriptivo. La principal técnica utilizada fue la entrevista semi-estructurada; se entrevistó a nueve docentes, cinco pertenecientes a escuelas de la zona central de San José y cuatro provenientes de una escuela de zona rural de la provincia de Cartago.
Los resultados reflejan que en general existe poco conocimiento respecto a qué es la neurociencia, y se asocia principalmente con la rama de la medicina. En este sentido, predomina la noción de que el cerebro es el ente motor y regulador de todo el organismo, pero se carece de información respecto a cómo opera y cuáles áreas y funciones se ligan con el aprendizaje.
De acuerdo a las personas participantes, los procesos de enseñanza aprendizaje ocurren por estímulos—principalmente— visuales; creen, además, que a partir de conocimientos viejos se forman los nuevos. En este sentido el aprendizaje se produce al generarse nuevas conexiones cerebrales.
Por otra parte, en relación con la memoria se concibe que para que los conocimientos se prolonguen es importante repetir la información con cierta frecuencia y proveer de experiencias significativas asociadas para motivar la permanencia o recuerdo de la información.
Respecto a la relación entre períodos óptimos de aprendizaje, emociones, actividad física, alimentación, sueño y aprendizaje ligados con el funcionamiento cerebral, se desconocen las bases y mecanismos que subyacen a estas propiedades, las personas participantes tienen nociones de cómo estas actividades influyen en el aprendizaje, principalmente por la experiencia en su ejercicio profesional, pero no porque se conozcan en sí los mecanismos, sistemas, neurotransmisores entre otros aspectos, que intervienen y por ende desconocen el cómo propiciar e impulsar estrategias pedagógicas específicas acordes con la naturaleza cerebral.
La enseñanza y facilitación educativa en función de los conocimientos de la neurociencia demuestra que quienes participaron reconocen la importancia de la estimulación visual, del uso de técnicas lúdicas, de usar asociaciones, de estimular y promover el vínculo y aceptación afectiva, de dar sentido a los contenidos, alimentación adecuada y entornos atractivos para estimular el aprendizaje.
Sin embargo, estos conocimientos contienen pocos sustratos que permitan entrever bases de conocimiento respecto a los hallazgos de la neurociencia, por lo que se evidencia carencias de conocimiento de cómo se pueden impulsar estrategias pedagógicas acordes con los nuevos descubrimientos de la neurociencia para el campo educativo.
Además, un factor importante es que, a pesar de que las personas participantes reconocen la importancia de usar técnicas diversas y atractivas para facilitar el aprendizaje, señalan que en la práctica no siempre se utilizan por falta de tiempo y recursos.
En lo que concierne a la formación, este grupo de docentes expresan que hay una gran carencia de preparación en el tema, la mayor cantidad de personas menciona que no ha recibido en sus carreras profesionales preparación ligada con neurociencia y su relación con la educación. Sólo dos docentes mencionan haber llevado materias en su formación docente reciente (grados superiores) que sí contaban con contenidos provenientes de la neurociencia. Por otro lado quienes participaron de esta investigación, manifiestan que en cursos de actualización profesional tampoco han recibido este tipo de información.
Por otra parte, las personas participantes privilegian la internet como principal medio para obtener información sobre las neurociencias, como segunda fuente mencionan al Ministerio de Educación Pública. Por último, las universidades son poco mencionadas.
Surge además como tema emergente la dificultad que sienten varias docentes para actualizarse, porque tienen múltiples situaciones y responsabilidades que cubrir ligadas principalmente con las triples jornadas laborales asociadas a las mujeres según roles de género tradicionales.
En general como conclusión principal de ésta investigación se destaca que es necesario crear mecanismos de incorporación de la neurociencia al sistema educativo costarricense. Particularmente en la formación docente se hace necesario primero que las entidades encargadas de la formación de educadores reconozcan el impacto de los avances de la neurociencia en los procesos de enseñanza aprendizaje, pero, para que se dé ese reconocimiento, se debe conocer y buscar alianzas con las entidades que trabajan el tema en el país.
Una vez logrado esto se pueden formular programas de capacitación/formación atinentes a la realidad educativa, de forma tal que se establezcan metodologías que permitan entender y dinamizar las prácticas docentes en función de la naturaleza del cerebro, para así favorecer el aprendizaje y brindar mejor atención a las poblaciones estudiantiles.
En cuanto a la otra vertiente, que tiene que ver con las políticas educativas del país, también se hace necesaria la vinculación con el estudio y hallazgos de la neurociencia; de modo que se pueda enriquecer y ampliar la visión educativa del país, de manera que se puedan aumentar las herramientas para hacer más efectiva, oportuna y atinente la educación actual. | es_MX |