Competencias y actitudes lectoras en el tercer ciclo de la Educación General Básica. Experiencia llevada a cabo con alumnos de noveno año del Liceo Diurno de Esparza, 2008.
Resumen
Literatura es el término que designa un acto peculiar de la comunicación
humana y podría definirse, según la palabra latina que le da origen, “litterae”,
como el arte de escribir, escritura, alfabeto, gramática, conjunto de obras literarias.
El valor de la lectura es insustituible. Sin ella no es posible comprender la
información contenida en los textos y asimilarla de un modo crítico. La lectura
estimula la imaginación y ayuda al desarrollo del pensamiento abstracto. En la
actual sociedad de la comunicación, caracterizada por la sobreabundancia de
datos, la lectura comprensiva tiene un papel clave para convertir la información en
conocimiento.
Leer tiene que ver con actividades tan variadas como la dificultad de un
niño pequeño con una frase sencilla en un libro de cuentos, un cocinero que sigue
las normas de un libro de cocina, o un estudiante que se esfuerza en comprender
los significados de un poema. Leer proporciona a las personas la sabiduría
acumulada por la civilización. Los lectores maduros aportan al texto sus
experiencias, habilidades e intereses; el texto, a su vez, les permite aumentar las
experiencias y conocimientos, y encontrar nuevos intereses.
“La lectura implica, al menos, cuatro operaciones: reconocer,
organizar, elaborar y evaluar. Alcanzar el significado de los
símbolos gráficos empelados en el texto; combinar el significado de
las palabras de la oración, frase, párrafo o capítulo de marras; por
último, evaluar o cotejar los contenidos con los ideales, las
concepciones y sentimientos propios para aceptar o rechazar las
supuestas verdades o afirmaciones vertidas en el texto” (De la Vega,
1986, p. 36)
Leer es crear, es imaginar, es abrir una gama de posibilidades al
conocimiento humano. Sin embargo, con frecuencia los profesores de Español
comentan, en reuniones y asesorías, que no logran que los alumnos lean una
novela o cuento en forma completa. Se quejan de que los estudiantes prefieren
ver una película basada en el texto o pedir a un compañero que les cuente el
argumento del libro. Además, al realizar el análisis literario, los jóvenes entienden
muy poco de lo que leen, por lo que es el docente quien aporta la mayoría de
ideas.