Salud mental y derechos humanos: Monitoreo de derechos humanos en hospitales psiquiátricos costarricenses
Resumen
El derecho a la salud es un derecho humano fundamental contemplado en los instrumentos internacionales de derechos humanos de la Organización de Naciones Unidas (ONU) y la Organización de Estados Americanos (OEA) como un derecho exigible y justiciable. Está directamente relacionado con el derecho a una vida digna y un nivel de vida adecuado.
Algunos de los principales instrumentos del derecho internacional que mencionan el derecho a la salud como un derecho fundamental son el Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales de las Naciones Unidas (1966) y el Protocolo adicional a la Convención Americana sobre Derechos Humanos en materia de derechos económicos, sociales y culturales (“Protocolo de San Salvador”), adoptado por la Organización de Estados Americanos en 1988. En ambos instrumentos se contempla el derecho a la salud física y mental de todas las personas sin discriminación por motivos de raza, color, sexo, idioma, religión, opiniones políticas o de cualquier otra índole, origen nacional o social, posición económica, nacimiento o cualquier otra condición social.
Lamentablemente, y a pesar de que ha habido avances importantes en el campo, aún se piensa en salud como “bienestar físico”, y se olvida la parte psicológica implicada en el concepto; se deja de lado la salud mental como un componente fundamental derivado de la integralidad del ser humano y como consecuencia, quienes padecen trastornos mentales severos se encuentran aislados y relegados dentro de los sistemas públicos de salud.
La Organización Mundial de la Salud ha llamado la atención en el tema, y ha resaltado la ausencia de políticas estatales que se dirijan a atender a la población que sufre de trastornos de índole psicológica o psiquiátrica.